El tiempo inestable y los retrasos en el arranque perturbaron el inicio de la campaña, mientras que el aumento de los costes de producción y la elevada inflación ejercían presión a los productores.

La reducción del número de variedades cultivadas ha provocado una menor disponibilidad y pérdidas significativas (11.000 hectáreas, 650.000 toneladas). Esto ha impulsado la demanda, sobre todo del mercado nacional (supermercados y mayoristas), debido a la oferta limitada y a los elevados precios.

A pesar de las dificultades, los elevados tonelajes y los buenos rendimientos nos permitieron satisfacer parte del aumento de la demanda.

Los precios siguen subiendo, con una demanda impulsada principalmente por sectores distintos de los supermercados, que muestran interés por variedades específicas. Al mismo tiempo, los costes de producción aumentan, ejerciendo una presión que dificulta las negociaciones y las promociones. Al final de la campaña, las escasas existencias favorecen las importaciones, sobre todo de patatas de fritura y patatas blancas de pulpa firme.

Exportaciones mundiales: Durante el periodo 2023-2024, Francia exportó internacionalmente 2,556 millones de toneladas de patatas.

En conclusión, esta campaña ha estado marcada por los retos de la producción, los altos costes y el aumento de la demanda. Esto ha obligado al mercado a realizar complejos ajustes entre los distintos segmentos de distribución, transformación y exportación.